Forma parte ya del lenguaje cotidiano denominar Zona Cero a aquel espacio (físico o no) que ha sido objeto de un acontecimiento de tal magnitud que, automáticamente, pone el contador a cero en la historia particular de ese sitio (físico o no): primero para que no se olvide y, segundo, para que todo pueda ser reformulado desde ese nuevo punto de partida. El momento actual de crisis generalizada puede convertirse (si no lo ha sido ya) en la Zona Cero para la arquitectura en nuestro país: un espacio de tiempo, concreto, a partir del cual nos veremos obligados a buscar nuevos caminos. / Forms part of everyday language to call Zero Zone to that space (physical or not) that has undergone an event of such magnitude that automatically sets the counter to zero in the particular history of that site (physical or not): first so that is not forgotten and, second, so that everything can be reformulated from this new starting point. The present time of general crisis can become (if it has not already been) at Zero Zone for Architecture in our country: a space of time, concrete, from which we will be forced to seek new ways.

9/4/13

VUELOS DE HORMIGÓN Y ACERO / TELEFÉRICO DE MENOS É MAIS EN VILA NOVA DE GAIA (PORTUGAL)


Menos é Mais, Teleférico en Vila Nova de Gaia, 2007/ 2011. Fotográfo: © Alberto Plácido 2011

Casi como en una cinta sin fin -similar a la que veremos de inmediato- la VIII BIAU nos devuelve de Brasil a Portugal al encuentro de un magnifico ejemplo del modo de hacer, y entender, la arquitectura, a la vez precisa y sugerente, del tándem luso formado por Cristina Guedes y Francisco Vieira de Campos del estudio Menos é Mais, con oficina en Oporto.

Para este certamen, Menos é Mais han presentado una infraestructura de transporte urbano: un sistema de transporte teleférico que, más allá de su innegable funcionalidad, sirve, además, para cohesionar dos zonas de la Vila de Gaia (situada frente a Oporto, en la otra orilla del Duero) separadas por un importante desnivel y unidas, desde ahora, por con el continuo ir y venir, y el balanceo, de sus modernas cabinas flotando en el aire. Un cable físico “cose” las dos zonas de la ciudad y, en cada extremo, se ancla a sendos edificios, cada uno con un carácter distinto. El de más arriba, encaramado en una ladera de casas apretadas, se presenta como un amable acompañante del modesto vecindario con un vestido hecho a medida de hormigón; desde su cubierta, convertida en una “plaza-balcón” sobre el Duero, el usuario toma contacto, por un momento, del salto en el aire que va a emprender o acaba de hacer.


© Alberto Plácido 2011

Abajo, a la cota del majestuoso Duero Menos é Mais han trazado una segunda estación; un objeto a modo de escultura que descansa en medio de una plaza alfombrada con un precioso mosaico irregular de adoquines de piedra típicamente portugués. Un artefacto que se ancla al suelo con una potente base de hormigón y que, en altura, el pétreo basamento parece transformarse (por la continuidad que presentan los transiciones “a media caña”) en dos grandes vuelos a modo de pétreo “dosel” que coloniza la plaza. La masa del hormigón queda contrarrestada por la delicada y cambiante piel de costillas metálicas que mantiene, visualmente, el volumen de la estación flotando en el aire; como las cabinas.


De los autores............
El desafío de este proyecto ha sido la intervención en un extraordinario entorno urbano y su armonización con la complejidad tecnológica del teleférico. Este tipo de transporte arrancó como una propuesta por parte de la municipalidad de Vila Nova de Gaia con dos claros objetivos desde el punto de vista lúdico y funcional: dar una nueva vida al lugar conectando la zona de bodegas de vino de Oporto y la margen izquierda del río Duero, situadas a una cota más baja y que acoge muchos restaurantes y bares, con el metro y la Serra do Pilar a una cota superior.

Estación Alta / Motriz
© Alberto Plácido 2011
La Estación Alta se funde con el potente muro existente y pretende ser neutra y abstracta, sin lenguaje, casi intemporal. El proyecto integra la ortogonalidad de la trama urbana con la oblicuidad del eje del teleférico, mediante la yuxtaposición del carácter monumental de la construcción en la escarpada ladera con la escala doméstica de las casas adyacentes. El acceso a la cota superior se posibilita mediante rampas y escaleras que conducen a la “cubierta-mirador”, que consolida y remata el potente muro de contrafuertes.


Menos é Mais, Estación Alta, alzado oeste, planta 3 y  sección





© Alberto Plácido 2011

© Alberto Plácido 2011

© Alberto Plácido 2011
















Estación Baja / Tensión

© Alberto Plácido 2011

En la implantación del edificio de la Estación Baja, en la margen izquierda del río Duero, ha sido prioritario acentuar el uso público del espacio mejorando su accesibilidad. El concepto arquitectónico de la Estación Baja está basado en una estructura muy sencilla, y práctica, inspirada en el esqueleto de un barco: un esqueleto de acero con enrejados verticales de aluminio suspendidos sobre una estructura central (quilla) de hormigón que sostiene dos ménsulas laterales. Dos escaleras abatibles y suspendidas permiten que el edificio quede aislado cuando está fuera de servicio, sin necesidad de recurrir a vallas pero garantizando la seguridad del espacio.


 



Menos é Mais, Estación Baja, planta, sección y alzados
  

© Alberto Plácido 2011















© Alberto Plácido 2011

© Alberto Plácido 2011















© Alberto Plácido 2011


La forma arquitectónica surge como una demostración de la axialidad propia de este tipo de equipamientos, donde el eje inmaterial –el del movimiento a lo largo del recorrido en cable– coincide con el eje físico y estructural del edificio, que incorpora los postes de la estación. El eje estructural de soporte de los edificios es también una condensador infraestructural –ya que concentra diferentes equipamientos de apoyo al funcionamiento del teleférico (taquillas, punto de información, lavabos, kioscos)– mientras la plataforma de embarque aparece elevada.

Se trata una puesta en escena en dos actos. La forma ritmada que ofrece el enrejado da al objeto una apariencia mutante a través de suaves efectos ópticos de transparencia y opacidad según el punto de vista, y del movimiento de la luz a lo largo del día; introduciéndose el ritmo, la cadencia, “el tempo”, lo mucho que se ve y lo mucho que se oculta.


© Alberto Plácido 2011






























Fuentes:
+ Menos é Mais
+ Fotógrafo: Alberto Plácido
+ VIII Bienal de Iberoamericana de Arquitectura y Urbanismo. Cádiz, 2012









MENOS É MAIS................................................................

© Alberto Plácido
Menos é Mais, Bodega Quinta do Vallado, Peso de Régna 2007

















© Alberto Plácido

Menos é Mais, Unidad Industrial Inapal Plásticos, Leça do Bailo
© Leonardo Finotti
Menos é Mais, Inapal Plásticos, Palmela











© Fernando Guerra
Menos é Mais, Inapal Metal, Palmela